La indignación prefabricada


Finalmente y como se preveía, aparecieron muertos los Pomar.

24 días después de su desaparición y de una tensión generada por los medios como hacía mucho no se veía, tuvieron su merecida recompensa. Una historia que incluyó videos del padre de la familia saludando a la cámara del peaje con un gesto equivocamente perturbador, sugerencias de que el padre los podría haber matado a todos, vecinos declarando que tenían problemas de familia, vecinos diciendo que eran gente normal, etc etc.

Nuevamente la cobertura periodistica del tema fue escalofriante, pero no por la crudeza de las imágenes –que no las mostraron sólo porque no las tenían- sino por el espíritu vindicativo de los periodistas, sus micrófonos acusadores yendo delante de su tan dudosa formación profesional –arriesgo a que la gran mayoría no conoce el significado de la palabra “deontología”- amparados en proclamarse una especie de médiums para que ese ente llamado “la gente” conozca lo que sucede, porque es la obligación y cualquiera que ratacee información es pasible de ser sospechoso-.

Stornelli fue hasta el lugar a poner la cara y hacer gimnasia verbal en cosas que realmente no interesan más que a la gilada. Si como parece que sucedió murieron en un accidente, seguramente fue en el acto, entonces todo lo escrito y hablado es polvo, si los hubiesen encontrado hace 23 días iba a ser lo mismo, pasa que cuando mueren personas jóvenes –y si son caucásicas, mejor- hay una sensación de absurdo importante y dificil de tolerar. Pero quizás se trate de algo muy humano de no poder aceptar ciertas cosas, como lo imprevisible. Un día vas manejando en tu auto, hacés una mala maniobra y chau. Es absurdo, si, pero es. Y tratar de buscar respuestas puede llevar a lugares insospechados, buscar responsabilidades en los otros, en una autoridad, un paternalismo que está en la base del desarrollo cognitivo pero que hay que superar.

Es gracioso escuchar la indignación prefabricada de los periodistas, personas que nunca tienen nada que perder porque se posicionan en un lugar de querellantes, especie de alma bella (ya hablaré sobre esto) que se indignan porque hay gente que no reconoce errores en la investigacion, acusan a otros por el estado de la ruta, si esa zona no tendría que estar sin yuyos, entre expresiones como “prima facie”, “a priori” (que nadie lo usa bien) para luego volver a sus casas para ponerse la cremita anti age.

Muchos de los que leen mis peroratas son periodistas y gozan de mi simpatía y amistad –supongo- y por suerte no se dedican a estas cosas, son nobles y honestos en lo que hacen, aunque outsiders de las grandes ruedas y cocinas mediáticas. Pero qué bajo está el nivel en la mass media. Obviamente hay excepciones - Arlt hubo uno sólo- pero no son las que me interesan ahora. La imagen de un grupo de cuervos –los noteros- en un árbol esperando el cadáver para llevarle a los pequeñines –los del estudio- se me hace simpática.

Si fue un accidente y sólo eso (escribo esto a horas de conocerse el hecho), ¡que importa todo lo demás! ¿Qué importa un rastrillaje si un auto volcó y se metió en una zona inaccesible? Todo lo demás no hace más que desnudar la lógica periodistica, su ética de barrilete y su más profunda ideologización, que como el Diablo, hace su mejor truco al hacernos creer que no existe.

Si tan sólo reconocieran (mos) que las cosas son más Maquiavelo y menos Rousseau todo sería más corto y menos vergonzoso.

8 comentarios:

... | 8 de diciembre de 2009, 16:26

"Muchos de los que leen mis peroratas son periodistas y gozan de mi simpatía y amistad –supongo- y por suerte no se dedican a estas cosas, son nobles y honestos en lo que hacen, aunque outsiders de las grandes ruedas y cocinas mediáticas...." Yo estuve en un tractor mediático enorme, y me fui, porque gastaba mucho en viáticos y se me reconfortaba poco el corazón.

... | 8 de diciembre de 2009, 16:26

uh, firma Ana, pero soy su esposo, Ariel.

c | 8 de diciembre de 2009, 17:30

Justo comentaba algo parecido cuando escuchaba la noticia por la radio. Esa indignación que se les notaba a los periodistas, cuando decían "acá insisten en que fué un accidente", porque un accidente sin narcos ni extraterrestres no garpa, claro. Acusaban a los encargados de la investigación de no trabajar y cuestionaban los métodos utilizados en los rastrillajes. Los periodistas! después de haber afirmado miles de hipótesis falsas, de haber desinformado y mentido a cualquiera que siguiera el caso. En una comunicación con un fiscal lo pinchaban preguntándole que había pasado con las hipótesis de la droga, de la esquizofrenia de Pomar, del escape de sus deudas... todas cosas que los periodistas mismos habían inventado! es que los tiempos de la investigación no van con los del noticiero.
Pobres tipos los Pomar. En 24 días los convirtieron en morosos, pobres, malos padres y latentes asesinos seriales. Decir que, como vos, tengo muchos amigos periodistas y se que no todos son así. Sino, como diría un gran periodista local: suerteee!

flor | 8 de diciembre de 2009, 18:16

Nunca podría trabajar así. Nunca. Y me permito quebrar aquella trillada frase. Puedo decir "nunca".

Hace unos años, estuve una semana en América, creo que lo conté. 5 días. Eso se bancó mi estómago, mis nervios, hasta ahí se bancó mi decencia. Porque está todo bien, todos saben que la tapa de Sandro o la del Papa la tienen preparada hace muchos años, pero que, viendo una imagen de Letizia una mina salte de la nada a decir: "está anoréxica" y que de eso, de un comentario pelotudo, fundado en la nada, al día siguiente se haga una nota: "Letizia anoréxica"... De eso podés ser cómplice o no.

Cuando estaba en la facultad un profesor nos mostró el ejemplo del mal periodista: era una filmación en la que un tipo, un perverso, asqueroso, pinchaba a una nenita para que dijera lo pobre que era, que ella no tenía computadora y se largara a llorar.

Un día, a una clase fue Guillermo Andino. Yo le pregunté a Andino, cómo podía dormir tranquilo sabiendo que hace lo que hace. Andino, por supuesto, se hizo el pelotudo.

Unos años más tarde, tuve la chance de entrevistar a Marcela Pacheco. Un fragmento de la entrevista que quedó fuera de la versión final, me impresionó mucho. Me dijo: "Yo no puedo ir a entrevistar a un pendejito (y lo he escuchado en una isla de edición): “¿cómo te metieron la ramita”? Eso le preguntaron a una nenita a la que habían abusado en la provincia de Buenos Aires. Esas cosas son miserables. Yo me he negado a hacerlo. Me sale así, es involuntario e indignante: no soporto la mierda para con el otro, no soporto que se trate al otro como un sorete, para tu propio beneficio".

Hoy estaba en un bar cuando se conoció -mejor: cuando los medios informaron- la noticia. A mi espalda había un televisor encendido en TN. Gracias a dios estaba de espalda. Las únicas dos veces que me di vuelta alentada por mi interlocutor, lo que vi fue un morbo tremendo. Mostraban imágenes de video de las nenas jugando y un zócalo que anunciaba sus muertes. ¿En qué cabeza, en qué estómago cabe? Se veían imágenes sin audio y dos segundos me bastaron para entender que, encima de todo, estaban tirando información sin filtro y la estaban poniendo en los zócalos. Era una sucesión más o menos así: "Encontraron cuerpos" "Serían los Pomar" "Los pomar están muertos" "Confirmado: los Pomar están muertos" "Sería un accidente", "están bien muertos", etcétera. Sin filtro alguno.

Y, por supuesto, la hipótesis del accidente no les conviene a ellos que en el medio (en el medio del medio) se cagaron en el honor y en la intimidad de una familia.

Cuando vos leés un diario amarillo y sabés que es amarillo, conocés sus reglas. Entendés, por ejemplo, que hay un límite difuso entre ficción y realidad. Ahora, es raro cuando no hay reglas. Cuando cualquiera de los canales, de los diarios y las radios que se la pasaron hablando mentiras, que crearon ficciones a gusto y placer, se escudan bajo otro color que no es el amarillo y esconden la mano que tiró la piedra.

A los seis años le dije a mi madre que quería ser periodista. Ella me dijo: "No, es muy peligroso".

Quizás, en su extraña lógica, tenía razón.

Joakkin | 8 de diciembre de 2009, 21:51

Confirman que los FIAT no son confiables y que cuatro fiambres en la ruta venden más que el cabaret de River

LA MATANZA (env. especial).Al final, luego de dramatizar y sacar varias conclusiones a todo trapo, para que Andino y el forrazo de Barili digan pavadas y pongan cara de poker en el flop cuando hablan de conspiración, los Pomar fueron hallados hechos pomada al costado de la ruta 31 luego de 24 hs de su desaparición.
En el transcurso del día de la búsqueda mucha gente especializada hipotetizó sobre el paradero de la familia." Muertos.Muertos.Los mató.Los mató a todos" asevera el ministro de cosméticos e higiene rectal Dr.Jorge Topessi."Se los llevó al campo para matarlas. Ella se acostaba con el mejor amigo que trabaja en Hacienda, hacia unos tres meses que vivían a las puteadas, ella salía los miércoles por la noche mientras él estaba en la oficina para ver a su amante.Don Pomar se enteró porque habían ido al mismo telo" agrega."Dejó a las hijas abandonadas y la mató" dice el ministro, mientras toma café en una taza de Herminio Iglesias.
Otros aseguran que Fernando Pomar tendría negociados clandestinos en Colombia, donde opera ilegalmente desde su base militar en Villa Lugano."Fernando era un tipo oscuro,no saludaba, tenía cara de orto, ni se hablaba con la jermu y era confeso admirador del puto de Patti" cuenta Alejandro, un canillita del barrio las Flores, quien le habría vendido el último ejemplar del diario Popular la mañana anterior."Los Pomar están bien, pasa que eran medio hippies y les pintaba cualquiera a veces" dijo Fany Mandelbaum antes de desayunar y depilarse el bozo.
Cuando se confirmó el accidente, las quejas no se hicieron esperar:"Se los dije. Yo les avisé tres días antes,pasa que a mí nadie me da pelota porque me creen una vieja de mierda" dijo indiganda Aschira, quien minutos después pronosticó que Costa Rica ganará el mundial, a pesar de no haber clasificado.
"¿Sabés lo que pasa? Los FIAT son una bosta. Ni bien supe que tenían un Duna Weekend le dije a mi mujer: Se hicieron torta en alguna de esas rutas hechas pija del medio de esta provincia del orto". "Qué querés? Vos venis medio puesto a 150 en una bosta como un Duna, agarrás un cuis y vas a parar con las vacas" sostiene Mariano, un simpático empresario que paró a dialogar con nosotros y emprendió su retirada en su Porsche Cayenne.
"La policía no hace nada. No puede ser. Son unos hijos de puta como el estado, que no arregla las rutas, el rastrillaje ese lo hacía mejor el pelotudo del marido de Adriana Aguirre. No pueden encontrar un auto al lado de la ruta y después se quejan de Julio López.Por favoor.." dice indignado Rodolfo Barili, conductor de Telefé Noticias."Y yo tengo que hacer malabares con homicidio y narcos rusos, mientras me ponen un video de la nenita jugando en su casa.Che Germán, cuándo arranca Estudiantes el mundial?" dice en el corte.Minutos después, agrega que todos estamos conmovidos por la inoperancia del gobierno y recemos por las jóvenes y no por el potencial asesino del padre.
"Son todos narcos" repite tajante Cordera, antes de cagar a otro amigo.Mientras, el país está como está. La inseguridad es total y cuatro inocentes han sido víctimas una vez más del horror del manejo argentino y de las marchas de la CTA.
Por hoy,dejaremos el tema para reflexionar dónde estamos y PARAR de una vez de navegar en los ríos de la congoja.
En el blog mañana, África sería un continente puramente cavernícola y abocado al canibalismo para el 2012, en estimaciones de la Universidad de Birmingham. Hablaremos de eso más tarde, luego de toda la cobertura del mundial que se viene. Soy Luis Majul y te quiero en mi equipo.

The Rotten Journal

Juan Antonio | 9 de diciembre de 2009, 7:55

Estoy de acuerdo con Ana, aunque como buen periodista Ana no es Ana y se escude en el anonimato.
Lo que pasó con los Pomar es lo mismo que pasa con cada nota que es noticia que es realidad que es lo que pasa: los medios la construyen a su antojo y por su antojo es que cuando algo debiera ser creíble no lo es, cuando algo debiera ser lo que pasa no lo es más que en la construcción que nos morfamos quienes somos parte de todo esto sin ser parte.
En el caso puntual del misterioso episodio Pomar saco al menos dos conclusiones base: la primera es que a los medios les vino como anillo al finger el accidente ya que a sólo 20mts de la ruta se evidencia que el país es un caos y que el Gobierno de la Provincia y los Kirchner hacen todo mal y el accidente se mete en la misma bolsa que la inseguridad y todo lo que nos está comiendo la cabeza día a día; la segunda conclusión es que evidentemente los restrillajes no fueron otra cosa que el reflejo de un país a medio terminar (no puede ser, ciertamente, que no se haya evaludad como primera hipótesis la idea del accidente en los poquísimos kilómetros que los separaban desde el peaje al destino, y que se haya rastrillado la zona como 8 veces sin encontrarlos nos habla de la ineptitud del que comandaba esos rastrillajes, o de sus comandados). Las dos conclusiones a las que llego tienen algo que las hermana: nadie hace las cosas en serio.
Periodistas como Arlt los hay, y creo que muchos más que los que había en las épocas en las que Arlt escribió sus aguafuertes. Pero también hay más hijos de puta, que son los que construyeron estas megaempresas de la comunicación, aliados al poder para el juego político que nunca cesa. Detrás de todo, en el archivo, quedan los pobres Pomar que murieron en un accidente de tránsito (uno más en el país donde muere mucha más gente por accidentes que por crímenes delictivos), y de los Pomar nadie recordará más que su misteriosa desaparición, su probable abdución extraterrestre, el padre que era violento, que fajaba a la esposa, tenía un arma y no había dicho la verdad cuando dijo que lo esperaba una entrevista de trabajo en Pergamino.
Ni los medios ni la Policía (ni nosotros, los de las hipótesis) vamos a hacer un mea culpa. La hora de pedir perdón a la memoria de los finados quedó tan escondida como los Pomar de hace 23 días.

Lisandro Capdevila | 9 de diciembre de 2009, 14:50

Esposo de Ana: sin el corazón contento no se puede.

Parece que la mujer se habría arrastrado cual Julieta hacia los brazos de su marido y en esos 5 minutos antes de dormir yo me pregunto: ¿¿¿¿Dónde estaba el Estado????

Flor: si, me contaste, tremendo estar tras bambalinas de esos crápulas. Y sin duda prefiero a los amarillos que se aceptan, por eso aunque en su vileza, me cae mejor Chiche que Biassati, es como el ejemplo que una vez cité de Zizek sobre los padres vieja escuela y los padres edulcorados de ahora.

Joakk: me cagué de risa. El Rotten Journal puede ser la versión escrita de "hasta cuando?" sin duda.

J: como canta Jarvis "Cunts are still running the world" Y si.

Lu (akicosquin) | 10 de diciembre de 2009, 5:55

María Soledad, Nair Mostafá, ésas eran buenas épocas...

Hablando en serio, seguí el caso por internet y la verdad era que angustiaba bastante. Ayer cuando me enteré sentí una mezcla de dolor y obscenidad ajena, porque, como siempre, la verdad - y me permito expresarme en un término tan absoluto- era tan tan simple que desnudó todos los entretelones. Por supuesto que no habrá mea culpa, eso no existe, es todo tua culpa.

Realmente me indigna la necrofilia de los medios y la cropofagia que nos quieren estimular. Y eso es en todos lados. Concuerdo totalmente con tu idea de el ente que llaman gente. Como siempre, eximio el post.
Me disculpo por la brevedad. Debería estar haciendo otras cosas y la culpa no me deja extenderme.

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